miércoles, 9 de octubre de 2013

Abelia grandiflora / Abelia



Marico Goda / Wikimedia Commons
Familia: Caprifoliaceae
Procedencia: es un hibrido entre Abelia chinensis y Abelia uniflora
Arbusto siempre verde puede llegar al metro y medio de altura, ramas arqueadas que se dividen en otras menores y muy numerosas  las ramillas jóvenes son rojizas y tomentosas. Es una planta muy resistente
Hojas: ovadas, redondeadas en su base y acuminadas, escasamente dentadas, su color verde oscuro en su haz, algo más claras en su envés, con el frio adquiere tonalidades bronceadas
Flores: suavemente olorosas, situadas en racimos axilares y terminales en los extremos de los tallos principales, con forma de embudo blanco rosado 
Al terminar la floración persiste el cáliz  de color rojizo
Fruto: en aquenio, coronado por el cáliz persistente
Se propaga por esqueje
Muy utilizada en espacios públicos como especie ornamental, siendo ideal para formar macizos de arbustos
Puede plantarse en maceta
Debe su nombre genérico al médico y naturalista británico  Clark Abel, quien la introdujo en Europa, grandiflora por el tamaño de sus flores
Existen unas veinte especies de Abelias, muchas procedentes de hibridaciones, y cada una con sus propias características